Ser Periodista

   Y vuelvo por estos rumbos... Luego de inmolarme en el silencio, el pensamiento, algunas lágrimas y tantos sin sabores que me ha dejado este absurdo de país, tal vez mucho tiempo pasó desde la última entrada, pero mis convicciones, mis valores, la cordura me invita nuevamente a escribir unas cuantas líneas, el rumor desesperado, este sentimiento patrio que se me atraganta en las entrañas.

Días duros, difíciles, la constitución es cualquier alfombra, el tricolor un símbolo de campaña, el país, el país ¿donde quedó mi país? Como me dueles mi pequeña venecia.

   La cita hoy es con la libertad de expresarme con el mayor de mis anhelos con lo que me estoy formando, ayer, ayer se cerró la última ventana en televisión nacional que le permitía a la gente al pueblo darle voz al periodismo, ayer el ciudadano, los ciudadanos quedamos sin voz.

Se nos vulnero el oficio, se nos vulnero la profesión, ni Hugo Chávez lo logró pero sí sus herederos, hoy los medios nacionales se dedican a entretener, los circuitos radiales a musicalizar este caótico país y el único canal valiente, 24 horas de información, se doblegó y entonces va enrumbado a una especie de utilisima o casa club tv.

   Que absurdo! ¿Como diablos se estudia periodismo en un país así? ¿Como diablos se ejerce el periodismo en un país así? Con valentía, con ovarios, con los testículos bien puestos.

Es frustante, es doloroso, se callan las voces críticas se vilipendia la información, pero es que acaso ¿Queremos un periodismo complaciente? Entonces no es periodismo, el periodismo es libre, es crítico, es aire, es gente, es pueblo el periodismo no es gobierno, ni del gobierno ni para el gobierno, el periodismo es ciudadano y sí, los canales de televisión no son beneficencia, pero cuando se es un canal de noticias, de información, entonces se tiene que ser ético,profesional, libre, abierto, plural,participativo, ciudadano, todo eso que fue Globovisión...

Hoy, en estas horas duras, tristes, acobardantes, yo, como hombre, venezolano, joven y estudiante de comunicación social, con el alma quebrantada como quebrantado está el sentimiento nacional, quiero hablar por mi y quiero hablarle a quienes me leen, a quienes dedican el tiempo de indagar en mis líneas de catarsis, de desenfreno..

   Yo decidí ser periodista hace 6 años, sí, Gracias Hugo Rafael te debo esa... Recuerdo completamente aquella alocución del 28 de diciembre de 2006 "no hay Concesión para ese canal golpista Radio Caracas Televisión RCTV" fue intrigante ver a quién entonces era el presidente de la república hablar tan convencido tan vilmente un día de los santos inocentes.

  Entonces por primera vez empecé a seguir un hecho, muchos hechos, una noticia, muchas noticias, el nacimiento de un nuevo movimiento estudiantil, valiente de manos blancas y también en esos instantes fui testigo de como un gobierno perseguía, maltrataba, golpeaba, humillada, vejaba con saña a las voces críticas, a las voces disidentes, a los periodistas... Sin mediar raza, condición, género, ni edad, perseguidos ahogados en gas lacrimogeno, con chalecos anti balas y cascos como cubriendo la guerra... Con los tacos se sus medios, con aquel uniforme de valentía podrido de pólvora y olor a plástico de perdigon.

  Me pregunté entonces ¿como podría servirle a mi país? Y la razón, mis valores, mi convicción democrática y libertaria, la conciencia dictó una orden "informando, dándole voz a las voces que no son escuchadas" ¡tengo que ser periodista! Esa inquietud, esa idea revolucionaria que a mi padre que aún es adepto al régimen "chavista" no le agrada, refuta y en una imagen triste de un equipo reporteril de Globovisión asediado por gas lacrimogeno, le dije "Ahí mismo en unos años, tal vez en otras circunstancias pero ahí mismo con esa valentía con la conviccion y la dignidad en alto estaré yo, defendiendo la verdad, dandole voz a mi gente y ahogado en gas lacrimogeno" ¡tengo que ser periodista!

   Seis años después... La situación es la misma, aún peor, más asedio, menos libertades, más represión, reina el silencio, la censura, ser periodista y no ser complaciente con el régimen es considerado un delito, pretenden vapulearnos por hablar con la verdad, siguen callando voces, siguen doblegando medios, son dueños de la hegemonía televisiva, manejan el mayor.porcentaje de emisores e intentan ahorcar los medios impresos.

Es ahora cuando la puerta es más pequeña, el camino aún más largo, el muro de berlín parece instalarse entre los venezolanos, intentan calar la desesperanza, el silencio, cada día nos golpean más, nos maltratan, intentan cada vez con más fuerza y contundencia extinguir nuestros valores, nuestro compromiso con la verdad, con la información, con la gente.

   Hoy más que nunca mis valores, mis convicciones, mi voluntad de ser útil a mi país, a mi gente, a quienes serán mis hijos, mis ideas revolucionarias de defender la verdad y mi dignidad siguen intactas más sólidas y rígidas que nunca en defensa de quienes pretenden extinguir el pensamiento crítico, el buen periodismo ciudadano. No sé ustedes pero yo, hoy con mucha más contundencia estoy seguro que QUIERO SER PERIODISTA!