Las letras de mi exilio
Cuando la desesperación te invade y el nerviosismo se hace parte de ti entras en un estado emocional poco estable. Todo te molesta, todo te parece estúpido y sobre todo si puedes comparar la vida que vives ahora mismo con la que viviste antes. No hay preocupaciones, o bueno, si las hay... Que en una fiesta salga todo bien, pagar el alquiler a tiempo, tener el cinturón puesto cuando vez a un policía y poca cosa más. Gracias a la vida soy latino pero gracias a Dios soy venezolano. Ser de Venezuela es una bendición. Tienes precaución, malicia y muchas cosas que a la gente le sobra. Es un arma de doble filo, hay que saberla utilizar. Es muy complicado salir a rumbear, cuando a tus hermanos los están matando y reprimiendo, necesito desahogarme de alguna manera, quizás esta es la forma más sencilla. Esta vida no es para mi, lo mío es reclamar, protestar por mis derechos, preocuparme de que no me vayan a matar, ni que me vayan a meter preso. Quiero preocuparme de eso p